SEO y SEM ¿En qué se diferencian?

Son dos patas del mismo banco. O sea, dos maneras de plantear la estrategia de marketing de tu sitio web. Seguro que has oído hablar de ambos, pero, si te aparece esta pregunta en el examen ¿sabrías contestar qué es SEO, qué es SEM y en qué se diferencian?

SEO y SEM, ¿dos personajes de película de dibujos animados? ¡NO! Dos maneras de hacer visible tu web frente a la competencia

Tranqui, que no estamos para examinar a nadie, sino para echarte una mano a definir y comprender los conceptos básicos de marketing.

Y estos son dos que hay que manejar, así que hoy toca clase (fácil) de marketing. Siéntate en la primera fila y empezamos.

Dos maneras de potenciar tu web: SEO y SEM

Antes de meternos en harinas, va una presentación básica para que sepamos de qué estamos hablando.

Las siglas que más te sonarán serán las de Search Engine Optimization, o SEO. 

SEO es el proceso de optimización de tu sitio web con el objetivo de hacerlo aparecer lo más arriba posible en los resultados que ofrecen los motores de búsqueda. Y, la palabra clave: gratis.

Sí, el SEO no te cuesta dinero, aunque sí tiempo.

El SEM o Search Engine Marketing se refiere al conjunto de estrategias orientadas a mejorar la visibilidad de tu web haciendo que aparezca en la parte superior de los resultados de búsqueda, utilizando publicidad de pago. 

Efectivamente, ahí tienes la otra clave: de pago.

El SEM te ahorra tiempo, pero te cuesta dinero.

Las dos estrategias son útiles, y hasta te diríamos que esenciales para promocionar tu empresa. Pero es necesario verlo más de cerca, así que vamos afinar un poco más.

SEO, una apuesta segura a largo plazo

El SEO pretende que tu sitio web ascienda en los resultados de búsqueda orgánica y se coloque en los primeros puestos, o lo más cerca posible. Para eso se utilizan técnicas que ayudan a que los motores de búsqueda los prioricen frente a otros similares.

El quid está en optimizar tu sitio web, mejorando diferentes aspectos para que Google, el motor de búsqueda más potente (también hay otros) lo visibilice. 

Esa optimización no es trabajo de un día. Supone ir revisando, mejorando, actualizando… para que el resultado “guste” cada día más a Google.

Por ejemplo, cosas que implica trabajar el SEO:

  • Investigar palabras clave, tanto las más evidentes como otras secundarias y más largas (long tails) que pueden ayudar mucho a posicionar contenidos.
  • Analizar a tu competencia, para saber por qué palabras claves están posicionando y atacarlas tú también.
  • Conocer bien cuál es la intención de búsqueda de tus usuarios para que, al optimizar tu web, te asegures de que ofrece la mejor respuesta posible.
  • Crear una buena arquitectura web. De ese modo, Google no se pierde y lee correctamente tus contenidos. Eso incluye, además de la estructura, optimizar cosas muy diversas, como las metaetiquetas, los títulos, las URL, las imágenes, etc.

Trazar un buen enlazado interno para dirigir el tráfico dentro de tu web y dotar de autoridad a las páginas que más te interesan, etc.

SEM, aumenta tus opciones a toda velocidad

Cuando utilizas estrategias SEM, pagas para que tu sitio aparezca en la parte superior de los resultados de búsqueda. Te adelantas a otros sitios que compiten por aparecer arriba utilizando estrategias orgánicas (gratuitas).

El SEM funciona por un sistema de pujas. Tienes que pujar por las palabras clave relacionadas con tu negocio, de forma que, cuando alguien busque alguna de ellas, tu resultado aparece arriba y tienes más posibilidades de llevarte el click.

Por supuesto, puede haber otras webs que persigan lo mismo que tú. De ahí la puja: cuanto más estés dispuesto a pagar, más posibilidades tengas de aparecer en los mejores puestos.

Otra forma de hacerlo es utilizando anuncios de Google. El sistema de Google Ads es similar, por pujas, para que tu anuncio aparezca junto a los resultados de búsqueda cuando alguien teclee alguna de las palabras clave.

Fundamental:

  • Definir objetivos para crear la estrategia. 
  • Elegir bien las palabras clave por las que vas a pujar, que sean relevantes de verdad para tu proyecto (aquí tienes 10 herramientas gratuitas para buscar keywords).
  • Tener un ojo puesto en la competencia. ¿Qué les funciona a ellos?
  • Establecer un presupuesto mensual y ceñirse a él.
  • Configurar (bien) la campaña. No sabes cuántas fallan porque están mal implementadas.
  • Probar y medir resultados. Probar y medir resultados. Probar y… hasta el infinito y más allá.

Y con esto, creemos que ya deberías tener una idea bastante ajustada de lo que es SEO y SEM.

¿Qué te conviene más: SEO o SEM?

¿A quién quieres más, a papá o a mamá? No hay respuesta para eso.

Fuera chistecitos, hablando de SEO o SEM, las dos son estrategias válidas y combinables. La proporción depende de cuáles sean tus objetivos, de la inversión que quieras hacer y de cómo se combinen estas herramientas con el resto de tu estrategia de marketing.

Así que lo más interesante es ponerse ante una pizarra en blanco y trazar un plan completo, decidiendo qué “armas” marketeras hay que usar para alcanzar los resultados que quieres.

Y oye, casualmente eso es algo que se nos da muy bien. ¿Quieres que te ayudemos? Encantados. Solo necesitamos que pinches en este enlace y nos cuentes qué es lo que quieres conseguir. 

¿Te ha gustado este contenido? ¡Pues tenemos más! Apúntate justo debajo y te mandamos un correo para avisarte cuando colguemos un nuevo artículo😉

últimos Posts